O si no que se lo digan a mis zapatillas. Resulta que como uno es un poco Homer Simpson, se llevó por error una zapatilla de cada talla cuando se las fue a comprar. Por mucho que intenté ignorarlo y usarlas de todas formas, 4 tallas menos de las que usas pueden hacerte un pooooco de daño, así que no quedó más remedio que cambiar a la zapatilla rebelde. Total, no sé si por pena, por una nueva política de integración social que yo desconocía o por cualquier otra razón... la chica de la caja después de cambiarme la zapatilla me dio 2 euros como forma de compensación (algo que tendría sentido si alguien te diese las zapatillas, pero eres tú el que las coge). Así que ya sabéis chicos/as/us, la próxima vez que vayáis a comprar ropa compradla mal aposta, y luego poned una cara parecida a la que acompaña a esta entrada cuando vayáis a devolverlas. Os lloverán facilidades*.
* Facilidades no garantizadas.
* Facilidades no garantizadas.
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No menciones a Homer Simpson k me da la risa tonta jajaja. Tantos años viéndolos hace que cada vez k cada vez k le veo o le escucho me acuerde de las escenas mas tontas y me de la risa... para k veas lo mala k es la tele...
ResponderEliminarPor cierto ya he hecho una porra para ver cuanto aguantas esta vez. La apuesta más alta esta en 4 actualizaciones :D
ResponderEliminarEstas seguro de que lo que ocurrio no fue que realmente eran dos zapatillas diferentes y unas costaban mas baratas que las otras? xD
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